Desde 2001 que un atleta estadounidense no ganaba el maillot de colores en un mundial, hoy Kate Courtney terminó con esa racha de derrotas y consiguió el oro en Lenzerheide.
Si la danesa tenia poder cuesta arriba, Courtney la tenia mucho más en las zonas técnicas y poco a poco fue recuperando preciados segundos en los bosques, raíces y donde podía acelerar más.
La carrera avanzaba y en la ultima vuelta Langvad comete un error fatal, deslizando la rueda trasera sobre una raíz. La estadounidense quien seguro estaba esperando hasta el final para acelerar, reunió todas sus fuerzas en el momento que vío el error de Langvad y se puso por delante hasta cruzar la meta, lugar donde se abrazaron ya que son compañeras de equipo.
La tercera fue Emily Batty, quien prácticamente corrió una sola carrera, mientras que la favorita de la casa, Jolanda Neff, tuvo que conformarse con el cuarto lugar.
La hora avanzaba y era el turno de los hombres, donde el favorito de la escena Nino Schurter se quedó con el primer lugar separándose a 11 segundos del segundo lugar.
Nino consiguió por cuarta vez el primer lugar en un campeonato mundial, donde la fanaticada local lo apoyó de principio a fin.
Durante toda la carrera Kerschbaumer y Schurter estuvieron a la cabeza, ni siquiera Van der Poel logró entrar a este duelo, llegando a un máximo de 12 segundos de los dos líderes. El clima fue perfecto en todo momento, seguro un ambiente propicio para una pelea que duraría hasta el final.
El tercer puesto fue para Van der Poel.